
Tan comunicados y sin embargo, tan incomunicados.
Vivimos en la era de las comunicaciones. Núnca antes habian existido tantos medios materiales para comunicarnos con los demás: télefono fijo, tlf móvil, messenger, facebook, tweeter, correo electrónico, correo ordinario...
No concebimos salir de casa sin nuestro movil. Viajamos con nuestro ordenador portatil, porque "necesitamos" estar comunicados. LLegamos a casa y lo primero es encender el ordenador en busca de las personas, la gran mayoria "virtuales", que están al otro lado de la pantalla.
Vivimos en la era de las comunicaciones y sin embargo, las consultas de los especialistas están llenas de gentes que adolecen de soledad; uno de los males de nuestro tiempo y de nuestra sociedad.
Probablemente somos más hábiles para comunicarnos a través de las nuevas tecnologias y cada vez más inhabiles para comunicarnos "cara a cara", para entender y hacernos entender, para el diálogo.
.